En más de una ocasión hemos mencionado que ciertos alimentos que le damos a nuestras mascotas, en este caso gatos, puede causarle problemas alimenticios. Por eso, en esta ocasión, en Mascotalia.es queremos repasar algunos interesantes hábitos con los que lograremos que nuestro felino se mantenga alejado de la obesidad, o en todo caso, que baje alguno de esos kilos de más que afecta su calidad de vida.
Una de las principales cuestiones que debemos conocer cuando hablamos de la obesidad de nuestro gato, es que no se trata de una mascota que podamos sacar a pasear, como en el caso de los perros, sino todo lo contrario, así que el único método efectivo que tenemos a nuestro alcance para poder hacer que baje de peso, está relacionado con la alimentación.
Luego de eso, se debe considerar que en la mayoría de los casos de obesidad de los gatos, ésta tiene que ver con un consumo excesivo de comida o a una insuficiente actividad física. Por eso, si tu mascota no es de moverse mucho, te aconsejamos que realices un análisis de la cantidad de calorías que ingiere cada día, de forma que puedas controlarlas, y eventualmente rebajarlas.
Trucos sencillos
Un buen truco al respecto tiene que ver, por ejemplo, con dar de comer al gato tres o cuatro veces al día en lugar de sólo una. Aunque al final de cuentas terminará comiendo la misma cantidad de alimento, la ventaja es que se moverá varias veces hasta la fuente, gastando calorías, además de conseguir que su estómago se encuentre en constante movimiento, algo que funciona también con seres humanos.
Por otro lado, tampoco podemos dejar de pensar en otros trucos sencillos, como por ejemplo, darle alimentos más ricos en agua, algo que también funciona en los seres humanos. Eso logra que los alimentos se salgan del cuerpo más fácilmente, de forma que el peso no se mantiene dentro del animal, sino que se pierde.
