martes, febrero 11, 2025
InicioCuidadosLas enfermedades neurológicas en las mascotas

Las enfermedades neurológicas en las mascotas

enfermedad neurologica mascota

Entre todos los tipos de enfermedades que pueden llegar a afectar a nuestras mascotas, las neurológicas son una de las peores, particularmente por poseer una característica que las hace distintas a las demás. La misma consiste, en concreto, en que se trata de enfermedades que o bien pasan desapercibidas, con lo que es difícil conocer su existencia, o bien se vuelven muy notable a los ojos, por lo que afectan al animal.

Lo primero que debes saber, en estos casos, es que si crees que tu mascota puede estar sufriendo una enfermedad neurológica, tienes que llamar inmediatamente a tu especialista de confianza, ya que de esa forma no sólo podrás ahorrar tiempo para el tratamiento que sea necesario, sino también dinero, debido a que a la larga, los remedios son mucho más costosos.

Ahora bien, seguramente te preguntarás también cómo haces para saber que tu mascota está sufriendo una enfermedad neurológica, y lo que debes considerar antes que nada, es que las mismas se pueden detectar con realizarle un chequeo general al animal. Por ejemplo, cuando lo sacas a pasear, fíjate que camine en línea recta, su reacción ante tus estímulos, cómo salta y como respira.

El hecho es que, incluso cuando te acercamos estos consejos, muchísimos propietarios cuentan a sus amigos que su mascota persigue su cola durante todo el día sin sentido, es decir, sin rascarse, o también que emite sonidos de queja toda la noche. Esto, por más que parezca anecdótico, puede ser el síntoma de una enfermedad neurológica que afecte a tu mascota de compañía, siendo casos especialmente descritos los de gatos y perros.

Además, la prevención resulta fundamental en todos estos casos, dado que una enfermedad neurológica puede derivar posteriormente en una afección medular, motivo por el cual la mascota puede quedar totalmente inválida, o incluso ni siquiera poder levantarse, aunque en algunos casos menores se salda con una cojera. En cualquier situación, una revisión cada seis meses de tu perro o gato es suficiente para que le evites este sufrimiento.

ARTÍCULOS RELACIONADOS

Más populares