¿Alguna vez has considerado la posibilidad de que tu perro corra peligro estando en el jardín de casa? Incluso a pesar de que sea una zona rodeada por una valla, aparentemente segura, aún pueden haber peligros acechando a tu mascota cuando salga a jugar bajo el sol de la tarde.
Es especialmente peligroso con perros jóvenes que tienen fijación por morderlo y mascarlo todo, especialmente hasta los seis meses, aunque hay razas que por instinto lo quieren coger todo con la boca, como el Golden Retriever, y por tanto corren más peligro que el resto.
Es posible que con el trabajo, encargarte de la casa y cuidar a tu perro no hayas podido hacer una búsqueda exhaustiva de los peligros que un jardín puede disponer contra tu mascota, de modo que aquí pretendo dejar una lista de los más comunes, para que te asegures de no tenerlos, o, en todo caso, estar siempre controlados y fuera del alcance de tu perro:
- Pilas de fertilizante.
- Fuentes ornamentales que contengan algas verdeazuladas.
- Animales venenosos como serpientes, arañas, sapos u escorpiones.
- Velas de citronella, de las que se usan contra los mosquitos, puesto que son venenosas.
- Los accesorios y tratamientos químicos para una piscina.
- Lechos que contengan cacao, algo muy típico para poner alrededor de otras plantas.
- Trampas para moscas que tengan methomil.
- Plantas venenosas para los perros, como la azalea o las viñas.
- Plantas para babosas y caracoles que contengan metaldehide.
No sólo el jardín puede ser un peligro, también el interior de la casa, de modo que esconde el material de jardinería y mantén bien cerradas las bolsas de basura, por si acaso. La protección de tu perro debe ser lo primero si quieres tener una mascota sana y feliz en casa.
Colaboración: Perro Obediente
Marcos Mendoza