Es verdad que con la edad, como cualquier ser vivo, nuestra mascota va perdiendo facultades y tiene riesgo de padecer más enfermedades o dolencias que cuando era joven.
También es verdad que hay ciertas partes del cuerpo que se ven más afectadas que otras y ciertas enfermedades que aparecen con más frecuencia, por eso nosotros te informamos de las dolencias y cambios generales más importantes que puede sufrir tu perro en esta etapa de su vida. Lo primero es que el sistema inmunitario se ve debilitado a causa de la vejez, lo que provoca que nuestro perro corra mayor riesgo ante los virus o mayor facilidad, que cuando era joven, para desarrollar enfermedades bacteriológicas. Por eso es importante seguir muy atentamente el calendario de vacunaciones así como aumentar la frecuencia de los recordatorios.
Otra consecuencia destacable es el envejecimiento que sufre la piel, que se manifiesta por la aparición de dermatitis que deben controlarse para que no se extiendan por todo el cuerpo. Pues hay que tener en cuenta que la piel del perro mejora en cualquier caso aumentando la ingestión de vitaminas y oligoelementos.
Otro aspecto físico visible que presenta problemas con la edad es la dentadura de los perros. Las afecciones en los dientes suelen degeneran en afecciones a otros órganos cercanos por lo cual deben llevarse a cabo una o dos limpiezas de boca semanales para evitar la acumulación de sarro y si vemos las encías inflamadas debemos llevarlo al veterinario para que le practique uní boca con mayor profundidad.
En cuanto a las enfermedades, deben tenerse en cuenta las cardiorrespiratorias. que puede sufrir el perro en este periodo de ancianidad.
En cuanto a las afecciones del aparto urinario, debemos señalar que la mayoría de los perros a partir de los diez años sufren insuficiencia renal, lo que obliga a seguir una dieta alimentaria; además muchos ejemplares machos suelen presentar problemas de próstata.
Algo que debemos de controlar con cuidado es la aparición de bultos, ya que suelen convertirse en tumores. En las hembras suelen ser muy frecuentes los mamarios y en los machos los tumores en testículos y en próstata. En caso de que esto ocurra, debemos comunicar rápidamente la aparición de cualquier bulto al veterinario.
Por último, y en lo que se refiere a la salud mental del perro anciano, hay que decir que los perros de avanzada edad suelen sufrir depresiones y a veces se manifiestan con un comportamiento infantil y una tristeza aparentemente inmotivada. En estos casos los dueños pueden jugar un papel importante de alivio jugando más con el perro y mostrándole mayor atención para que se siga sintiendo en estos momentos tristes parte de la familia.