Un jardín es más o menos lo que todos podemos imaginarnos, con sus árboles, plantas, pájaros y todos los elementos típicos de esta parte de la casa que hacen lo que uno llamaría, un sitio ideal para descansar y amigarse con la naturaleza. Ahora, bien la situación de los que nos hemos amigado con la naturaleza teniendo también una mascota, determina que nuestro jardín no puede ser como el de los demás.
Por eso, lo primero que debes tener en cuenta en estos casos, es que cualquier raza de perros necesita tener su tiempo libre y su ejercicio, por lo que el jardín será una parte de la casa que explore todo el tiempo, especialmente si es cachorro, y lo que lleva a muchas personas a crear un jardín dentro de tu jardín, utilizando una cerca donde ponen sus plantas más preciadas o su huerta, si la hubiera.
Del mismo modo, hay quienes optan por la solución inversa, es decir, un espacio especialmente pensado para la mascota, donde pueda aprovechar el sol, jugar, hacer ejercicios y disfrutar de la vida. Allí deberá tener, indispensablemente, algunos elementos como por ejemplo una zona sombreada, una cerca de madera que limite sus movimientos, y puede que tal vez sus propios juguetes.
También es importante, si efectivamente vas a poner una cerca, que utilices una franja de pavimento del otro lado de la misma, ya que es muy probable que el perro intente saltar o apoyarse sobre ella si estás del otro lado, y de ese modo te evitas que vaya desparramando barro por todos lados, especialmente dentro de la casa.
Finalmente, considera que si tu perro va a habitar en el jardín, conviene que haya plantas indicadas para ellos, ya que no pasará nada si las comes, como por ejemplo las siguientes: Phlox drummondii, Verbena hybrida, Viburnum tinus, Syringa vulgaris, Chaenomeles speciosa, Kalmia latifólia todas las cuales incluso son muy resistentes.